El seroma constituye una acumulación anormal de líquido seroso en el tejido y se localiza frecuentemente cerca de la cicatriz quirúrgica. Aunque puede darse en cualquier cirugía, es una complicación muy habitual en la cirugía mamaria produciendo dolor, hinchazón, e incluso drenaje de un líquido blanco o amarillo produciendo complicaciones en la cicatrización de los tejidos adyacentes.
El edema se produce por una respuesta inflamatoria fisiológica tras la agresión quirúrgica dando lugar a una hinchazón causada por el fluido atrapado en los tejidos del cuerpo.
Ayudamos a la reabsorción de los seromas y edemas posoperatorios a través de terapia manual específica como el drenaje linfático manual, medidas compresivas con vendajes, ejercicios y aparatología adaptada.